La idea del proyecto en todo momento fue lograr que la impresionante cifra de 100 jugadores pudieran participar en este evento. Hay varias razones por las cuales esto supone un gran reto, incluso para grandes servidores multijugador. Gracias a varias optimizaciones en el software que usamos, la capacidad de hardware disponible y al equipo técnico experto en configuración de servidores, finalmente se logró poder tener en una misma partida a todos los participantes de Medieval Hunger Games. Esto nos permitió no solo alcanzar un hito en nuestras capacidades técnicas, sino también ofrecer la seguridad de que todos los participantes podrían disfrutar del evento, por muchos que fuesen.

Explorar el mapa en búsqueda de cofres y herramientas con las que equiparse es el inicio de cualquier partida de la modalidad Hunger Games. Por ello, se decidió que el mapa no podía ser un mundo de Minecraft normal. El trabajo incansable de nuestros constructores y programadores hizo que el mundo creado para la partida se convirtiera en un reino medieval lleno de coloridos biomas, profundas grietas y múltiples aldeas, ciudades y estructuras.